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ANGELES ENCONTRADOS

A los 20 años perdí a una amiga muy singular que me distinguió entre muchas otras.

Hace 29 años tengo un angel especial en el cielo. María fue mi primer angel “consciente”.

A lo largo de mi vida se unieron ángeles muy especiales.

Hace poco, Amanda me enseñó que no todos los ángeles son celestiales. Muchos viven alrededor nuestro, y aunque no veamos sus alas, son personas elegidas especialmente para un abrazo, una palabra,

un encuentro, un viaje, o para lo que la vida nos ponga delante.

Esta colección es en reconocimiento a esos ángeles que nos rodean. Que son por un rato, por un tiempo, por un mes, por una vida. Sólo hay que estar abiertos a sus alas.